El Ejército de Israel ha bombardeado esta madrugada una zona de tiendas de reporteros junto al hospital Al Nasser, en Jan Yunis, al sur de Gaza. Según las fuentes, un dron israelí habría disparado un misil contra la tienda de campaña de la Agencia Palestina de Noticias, dejando dos periodistas muertos y ocho más heridos.
El ataque, perpetrado junto al hospital Al Nasser en el sur de Gaza, también ha dejado ocho reporteros heridos
El Ejército de Israel ha bombardeado esta madrugada una zona de tiendas de reporteros junto al hospital Al Nasser, en Jan Yunis, al sur de Gaza. Según las fuentes, un dron israelí habría disparado un misil contra la tienda de campaña de la Agencia Palestina de Noticias, dejando dos periodistas muertos y ocho más heridos.
Según los testimonios, la metralla de la explosión habría alcanzado siete carpas más. Además, las fuerzas israelíes habrían bombardeado también dos casas al oeste de Deir al-Balah, en el centro de la Franja de Gaza, matando a dos ciudadanos. Los periodistas se encontraban descansando tras la cobertura en Al Najar, en el centro de Jan Yunis, donde un ataque israelí acabó con la vida de un niño.
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El Centro Palestino para la Protección de Periodistas condenó en un comunicado el ataque e informó de que los periodistas se encontraban en la tienda trabajando, en lo que califica como una “clara violación del derecho internacional humanitario”. Desde el inicio de la guerra el 7 de octubre de 2023, el número de periodistas fallecidos en ataques aéreos israelíes en Gaza asciende a alrededor de 211.
Israel ocupa ya más de la mitad de la Franja
Desde el reanudamiento del conflicto contra Hamás el mes pasado, Israel ha ampliado su presencia en Gaza ocupando ya más de la mitad de la Franja, lo que está empujando a los palestinos hacia porciones cada vez más reducidas de tierra.
Israel ha justificado su creciente control como una necesidad temporal para presionar a Hamás a liberar a los rehenes, sin embargo, grupos de derechos humanos y expertos en Gaza apuntan que los terrenos ocupados podrían usarse para ejercer un control a largo plazo.
Por su parte, el Ejército israelí ha declarado que sus ataques se basan en inteligencia y que “evita en la medida de lo posible dañar a civiles, actuando conforme el derecho internacional”.
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