Matt Gaetz dimitió de su escaño por Florida en la Cámara de Representantes después de que el presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, anunciara que era el elegido para ocupar el cargo de fiscal general de su futuro gabinete. Su dimisión propició el fin de la investigación de tres años del comité de ética del Congreso sobre su presunto tráfico sexual, sexo con una menor, uso irregular de fondos de campaña, aceptación de sobornos y consumo de drogas. Varios senadores, que se encargarán de decidir si confirman su nominación en enero, pidieron que se revelara un informe con los detalles de la investigación. Pero, este miércoles, los cinco representantes republicanos del comité han votado en contra de su publicación, frente a cinco votos favorables de los demócratas, un empate que le evitará, de momento, el mal trago.
El comité de ética de la Cámara de Representantes bloquea la publicación de la investigación al elegido por Trump para liderar el departamento de Justicia
Matt Gaetz dimitió de su escaño por Florida en la Cámara de Representantes después de que el presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, anunciara que era el elegido para ocupar el cargo de fiscal general de su futuro gabinete. Su dimisión propició el fin de la investigación de tres años del comité de ética del Congreso sobre su presunto tráfico sexual, sexo con una menor, uso irregular de fondos de campaña, aceptación de sobornos y consumo de drogas. Varios senadores, que se encargarán de decidir si confirman su nominación en enero, pidieron que se revelara un informe con los detalles de la investigación. Pero, este miércoles, los cinco representantes republicanos del comité han votado en contra de su publicación, frente a cinco votos favorables de los demócratas, un empate que le evitará, de momento, el mal trago.
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Sin embargo, el bloqueo de la difusión del informe no evitará la polémica. Varios medios estadounidenses han tenido acceso a algunos de los documentos de la investigación, entre ellos, un listado de pagos realizados por el excongresista a dos mujeres que testificaron ante el comité que les había embolsado 10.000 dólares a cambio de sexo. Los hechos se produjeron en una de las fiestas organizadas por Gaetz y su grupo de amigos entre el 2017 y el 2020 en Florida, en las que, según reveló a NBC News el abogado de una de estas mujeres, Joel Leppard, abundaban las drogas y había menores de edad.
Leppard afirmó que una de sus clientas había testificado ante el Congreso que vio a Gaetz teniendo sexo con una amiga suya, de 17 años, que también habría sido contratada. El republicano, que también fue investigado por estos hechos por el departamento de Justicia que aspira a dirigir, ha negado todas las acusaciones, alegando que dicho departamento finalmente no presentó cargos contra él.
Lo considera un “ejercicio de venganza política” por parte de un Congreso en el que se ha ganado enemigos desde que asumió su escaño por primera vez, en el 2017. Fue él quien lideró el boicot contra el expresidente de la Cámara de Representantes, el republicano Kevin McCarthy, por haber pactado una prórroga presupuestaria con Joe Biden. “Las actividades sexuales lícitas y consentidas de los adultos no son asunto del Congreso”, declaró sobre la investigación del comité de ética.
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Matt Gaetz y J.D. Vance acuden al Capitolio para convencer a los senadores republicanos sobre su nominación
Ayer, Gaetz volvió al Capitolio junto al futuro vicepresidente del país, el senador J.D. Vance, con la intención de presionar a los congresistas republicanos para que bloquearan la difusión del informe. Se reunió también en la sala Strom Thurmond, a pocos pasos del pleno del Senado, con algunos de la decena de senadores que han afirmado públicamente que tienen dudas sobre su nominación, como John Cornyn de Texas, Thom Tillis de Carolina del Norte o Susan Collins de Maine.
Les explicó su plan de reforma completa del departamento de Justicia, en el que Trump ha prometido un despido masivo de los “burócratas deshonestos” que han participado en sus imputaciones federales por alentar un golpe de estado tras las pasadas elecciones o por llevarse un centenar de documentos clasificados a su residencia de Mar-a-Lago, en Palm Beach (Florida), tras abandonar la Casa Blanca en el 2021.
Con la composición actual del Senado (53 republicanos y 47 demócratas), después de que se haya renovado un tercio las elecciones del 5 de noviembre, basta con que cuatro legisladores se opongan a un nombramiento para vetarlo. Aunque Trump ya ha anunciado que pretende saltarse este contrapoder previsto en la Constitución mediante los “nombramientos en receso”, un mecanismo que permite al presidente nombrar funcionarios cuando el Senado no está en sesión.
Los demócratas piden al FBI que investigue los nombramientos, después de que Trump se haya opuesto a esta práctica habitual
Si finalmente el Senado confirma a Gaetz como fiscal general, será el encargado de retirar las imputaciones federales contra Trump, así como de perseguir judicialmente a sus adversarios políticos, contra quienes el republicano ha prometido venganza y a quienes ha definido como el “enemigo interior, más peligroso que China o Rusia”.
Algunos senadores republicanos se pronunciaron ayer, tras su reunión con Gaetz, en contra del “linchamiento” que consideran que está sufriendo. El senador Lindsey Graham, de Carolina del Sur, aseguró que “se merece la oportunidad de argumentar por qué debería ser fiscal federal”. El actual presidente de la Cámara de Representantes, Mike Johnson, que sucedió a McCarthy en el cargo, afirmó el viernes que pedirá “encarecidamente” que el comité de la cámara no publique las conclusiones de su investigación, pues sentaría un “peligroso precedente” porque ya no es representante.
La votación de este miércoles en el comité de ética evita de momento su difusión, pues se necesitaba que al menos un republicano votara a favor. Pero los demócratas ya han pedido volver a reunirse en diciembre para tomar una decisión definitiva. Algunos representantes han pedido directamente al FBI que realice un informe sobre Gaetz, algo que habitualmente hace la agencia federal con los nombramientos del presidente electo, pero en esta ocasión Trump ha rechazado firmar los acuerdos necesarios.
De todas sus polémicas designaciones, la de Gaetz es la que tiene menos números para superar el umbral de los 50 votos favorables en el Senado para ser confirmado. Pero también encuentran detractores entre las filas republicanas otros elegidos, como Pete Hegseth, que sería secretario de Defensa y también enfrenta acusaciones de carácter sexual, por supuestamente haber abusado sexualmente a una mujer, en un caso que cerró pagándole dinero en un acuerdo prejudicial. El propio Trump fue condenado el año pasado por abusar sexualmente de la columnista E. Jean Carroll, pero ni esa condena, ni las otras tres que ha tenido por difamación, por fraude y por falsificación documental, así como sus imputaciones penales, evitaron su victoria en las elecciones.
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