El ministro de Agricultura, Pesca y Alimentación, Luis Planas, se ha desvinculado de la contratación de Jessica Rodríguez, ex pareja del entonces ministro José Luis Ábalos, por la empresa pública Tragsatec, dependiente de su departamento.
El titular de Agricultura y Pesca asegura en el Senador que el contrato de Jessica Rodríguez no era de su competencia
El ministro de Agricultura, Pesca y Alimentación, Luis Planas, se ha desvinculado de la contratación de Jessica Rodríguez, ex pareja del entonces ministro José Luis Ábalos, por la empresa pública Tragsatec, dependiente de su departamento.
En su comparecencia en la comisión Koldo que se llevaba a cabo desde hace meses en el Senado a petición del PP, Planas ha insistido que la contratación del personal no está dentro de sus competencias. El senador del PP le ha reprochado que no se haya informado sobre los detalles del contrato para acudir a la comisión y poder dar información, ya que el contrato tiene indicios de irregularidad y por tanto del uso delictivo de fondos públicos.
El propio Planas ha dicho que de haber intervenido en este tipo de contrataciones a nivel administrativo o laboral habría sido “prevaricación”. Así, ha negado que Ábalos le preguntara específicamente sobre esta contratación y ha mostrado su repulso a cualquier tipo de corrupción.
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El titular de Agricultura se ha limitado a apuntar cada una de sus competencias y en cada provincia que actúa la empresa pública Tragsa. Ha explicado que sus competencias sobre las empresas a cargo de su ministerio se limitan a “revisar la eficiencia en la gestión, llevar a cabo el control del plan estratégico e instar a actuaciones de carácter extraordinario”.
“No es de mi competencia la gestión laboral de esas empresas, son elementos estrictamente internos de una empresa pública y corresponden a su ámbito de actuación en el plano del derecho privado”, ha insistido.
A raiz de la investigación abierta por el denominado ‘caso Koldo’ sobre el presunto pago de comisiones ilegales al exminsitro Ábalos y su asesor Koldo García, se descubrió que la entonces pareja de exdirigente socialista había trabajado para una empresa pública. Cuando Rodríguez fue citada a declarar en calidad de testigo ante el juez del Tribunal Supremo que los investiga, la expareja de Ábalos reconoció que estuvo cobrando una nómina pero que nunca fue a trabajar.
La empresa ha intentado desmentir esta versión aunque el magistrado Leopoldo Puente ha requerido información detallada sobre sus horas de trabajo y labores.
Mientras tanto, en esta misma comisión, el presidente de Tragsa, Jesús Casas, calificó este miércoles de “asqueroso” y “lamentable” todo lo sucedido con la contratación de Rodríguez y señaló que “jamás nadie” le dijo nada de contratar a Rodríguez, ya que no tenía relación con Ábalos.
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