Conservadores y socialdemócratas de Alemania alcanzaron este miércoles un acuerdo de coalición para formar gobierno, acicateados por la incertidumbre económica generada por los aranceles impuestos por el presidente estadounidense, Donald Trump. El bloque conservador de Friedrich Merz –formado por la democristiana CDU que él lidera y por su aliada histórica, la socialcristiana CSU de Baviera-, vencedor de las elecciones del pasado 23 de febrero, negociaba desde hace semanas con el Partido Socialdemócrata (SPD), cuyo actual rostro más visible es Lars Klingbeil, colíder del partido y jefe del grupo parlamentario.
La incertidumbre económica desatada por los aranceles de Trump acelera el pacto de coalición que hará canciller al democristiano Friedrich Merz en mayo
Conservadores y socialdemócratas de Alemania alcanzaron este miércoles un acuerdo de coalición para formar gobierno, acicateados por la incertidumbre económica generada por los aranceles impuestos por el presidente estadounidense, Donald Trump. El bloque conservador de Friedrich Merz –formado por la democristiana CDU que él lidera y por su aliada histórica, la socialcristiana CSU de Baviera-, vencedor de las elecciones del pasado 23 de febrero, negociaba desde hace semanas con el Partido Socialdemócrata (SPD), cuyo actual rostro más visible es Lars Klingbeil, colíder del partido y jefe del grupo parlamentario.
El contenido del acuerdo será presentado a las 15 horas de este miércoles en dependencias parlamentarias en Berlín, por Friedrich Merz; por Markus Söder, líder de la CSU y presidente de Baviera; y por los colíderes del SPD, Lars Klingbeil y Saskia Esken. El acuerdo deberá ser ratificado por las bases socialdemócratas –en una consulta que llevaría en torno a dos semanas- y por un congreso conservador a finales de abril, probablemente el día 28.
Con este horizonte, la fecha que se baraja para que Merz sea elegido nuevo canciller por el Bundestag (cámara baja del Parlamento) es el 7 de mayo. Eso permitiría que el líder conservador participe como canciller en los actos conmemorativos del 80.º aniversario del fin de la Segunda Guerra Mundial el 8 de mayo, día de la capitulación de la Alemania nazi.
Lee tambiénMARÍA-PAZ LÓPEZ | BERLÍN. CORRESPONSAL

Friedrich Merz y la CDU/CSU aspiran a empezar a gobernar cuanto antes, pues tras las elecciones generales –en que los conservadores quedaron primeros con el 28,6% de los votos– no han parado de bajar en los sondeos de respaldo, al tiempo que la ultraderechista Alternativa para Alemania (AfD) –que quedó segunda en las urnas con el 20,8%- va ganando terreno. En los comicios, el SPD fue la tercera fuerza, con el 16,4%.
Según una reciente encuesta del instituto demoscópico Insa para el Bild, CDU/CSU y AfD está ahora empatados al 24%. “Lo importante ahora no es solo un buen acuerdo de coalición, sino sobre todo la actuación del nuevo Gobierno”, dijo esta semana al respecto Carsten Linnemann, secretario general de la democristiana CDU.
Los últimos sondeos indican un gran avance del partido ultraderechista AfD, que empata al 24% con el bloque conservador CDU/CSU
Merz, que tras ganar las elecciones en febrero, calificó a los Estados Unidos de Trump como país aliado poco fiable, ha prometido incrementar el gasto en defensa, visto que Europa se enfrenta a una Rusia hostil y Washington no es fiable, y apoyar a las empresas que bregan con los elevados costes de la energía y con una caída de la demanda. Alemania lleva ya dos años de contracción y los aranceles suponen un duro golpe para su economía, muy centrada en la exportación.
El pasado 18 de marzo, antes de que se constituyera el nuevo Bundestag surgido de las urnas –se constituyó más tarde, el 25 de marzo-, Friedrich Merz consiguió la aprobación parlamentaria de una enmienda a la Constitución que relaja el freno a la deuda -limitación al endeudamiento de aureola sacrosanta entre los conservadores- para financiar así un histórico plan multimillonario de rearme y modernización de infraestructuras del país.
Internacional