El alcalde de Badalona (Barcelonès Nord), Xavier Garcia Albiol, ha declarado en los Juzgados de Badalona por el caso de la filtración de los datos médicos de Virginijus Ridikas, un hombre sin techo de origen lituano que falleció en la calle tras pasar por el Hospital de Badalona, apenas hace un año. En un pleno municipal, Albiol leyó en público un documento en el que se explicaban las patologías del paciente y el tratamiento que se le hizo. A la salida de los Juzgados, detalló que lo hizo para “defender la profesionalidad” de los médicos y el “prestigio” de la institución, después de que partidos de la oposición denunciaran “abandono institucional”. En este sentido, Albiol acusa a la oposición de impulsar una “campaña orquestada de desprestigio” que “no podía permitirse”.
El alcalde asegura que explicó los motivos de la muerte para “defender la profesionalidad” de los médicos
El alcalde de Badalona (Barcelonès Nord), Xavier Garcia Albiol, ha declarado en los Juzgados de Badalona por el caso de la filtración de los datos médicos de Virginijus Ridikas, un hombre sin techo de origen lituano que falleció en la calle tras pasar por el Hospital de Badalona, apenas hace un año. En un pleno municipal, Albiol leyó en público un documento en el que se explicaban las patologías del paciente y el tratamiento que se le hizo. A la salida de los Juzgados, detalló que lo hizo para “defender la profesionalidad” de los médicos y el “prestigio” de la institución, después de que partidos de la oposición denunciaran “abandono institucional”. En este sentido, Albiol acusa a la oposición de impulsar una “campaña orquestada de desprestigio” que “no podía permitirse”.
Albiol, que como en otras comparecencias judiciales ha estado acompañado por el núcleo duro de su gobierno -este viernes le han asistido los tenientes de alcalde Cristina Agüera, Daniel Gracia, Rosa del Amo- ha defendido que no podía tolerar un intento de “difamación” de los servicios médicos municipales.
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El alcalde, además, recuerda que en su intervención no “identificó” a la persona y que tampoco se dio “ningún dato médico” ni ha tenido acceso a ningún “expediente clínico”. Albiol dice que leyó unas “anotaciones” en un “folio” sobre los motivos por los que murió el hombre.
Los hechos se remontan al pleno municipal de julio de 2024, cuando Albiol leyó un documento con los datos médicos de un hombre sin hogar que había muerto en la calle un mes antes. En ese pleno, la oposición criticaba la gestión del sinhogarismo por parte del gobierno municipal, ya que la muerte del hombre coincidió en el tiempo con el cierre del albergue de Can Bofí Vell.
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“Eso me lo han enviado desde el hospital”, advirtió Albiol durante el pleno municipal en el que dio lectura de los datos. Durante la lectura del documento, en el que detalla detalles de la situación del enfermo a su llegada al hospital, así como el tratamiento que se le hizo, varios concejales le advirtieron de que podría incurrir en un delito.
“Por supuesto que lo leo. Si creen que estoy violando la privacidad, me denuncian, pero no aceptaré que se acuse al Ayuntamiento de haber matado a una persona”, respondió el alcalde. La líder de Guanyem Badalona, Dolors Sabater, le recogió el guante y le ha llevado ante los tribunales en representación de la familia del hombre sin hogar, que es lituana.
Indicios de delito
En este sentido, además de Albiol está denunciado también quien era delegado de Protección de Datos de la empresa municipal que gestiona el hospital, Badalona Serveis Asistencials (BSA). Este empleado público, que ya no ocupa el mismo cargo, firmó un polémico informe sobre el caso, que contradice la versión expuesta por Albiol en los Juzgados.
El responsable de Protección de Datos admite que se cedieron datos médicos al alcalde y que esto no respondió a ningún protocolo. También afirmó que se hizo para salvaguardar la “reputación” de la entidad. El informe afirma que el acceso de Albiol a estos datos es un “derecho inherente” a su cargo, como miembro del Consejo de Administración.
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Por otra parte, el juez que instruye el caso ya ordenó hace semanas la entrada y registro en las instalaciones de BSA para recabar información y evitar la eliminación de pruebas, al considerar que se desprenden “claros indicios de la comisión de un delito”. También se ha acordado el secreto de las actuaciones.
El Código Penal contempla penas de hasta cinco años de prisión y doce de inhabilitación por el delito de descubrimiento y revelación de secretos.
Homenaje a Virginijus
Coincidiendo con la declaración de Albiol en los Juzgados, el entorno de Guanyem y de la familia de Virginijus Ridikas ha organizado para este domingo una misa en la iglesia de Santa María de Badalona en homenaje al hombre, fallecido hace un año “tras un largo historial de desatención institucional”.
El acto, convocado para las 10 h, reunirá a familiares, entidades sociales y comunidades cristianas y quiere ir más allá de un acto religioso. Los organizadores lo ven como “un gesto de reparación simbólica y denuncia compartida frente al abandono institucional que sufrió”.
Desde Guanyem denuncian que “la misma maquinaria que desatendió a Virginijus fue utilizada para vulnerar su intimidad” una vez muerto. Una ciudad “digna”, defienden, no puede permitir que se vulneren derechos fundamentales: “Badalona no puede normalizar la impunidad de los poderosos mientras abandona a los vulnerables”.
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